Empezando por el final...

Esta entrada, aunque es la última que escribo, aparecerá la primera en el blog, y será extraño porque se trata de una breve conclusión personal...

Me gustaría decir que esta asignatura me ha sorprendido positivamente desde el principio hasta el final. Cómo podría explicarlo: 

No es que yo pensase con anterioridad que pintar un cuadro, o hacer una escultura, o un grabado fueran cosas sencillas. Para nada! Pero sí es cierto que muy en el fondo me daba por pensar (inconscientemente) que la base de todo artista era el talento personal. Y vale, de acuerdo, lo sigo pensando. Pero no era del todo correcto. Evidentemente, el talento es básico. Lo que quiero decir es que ahora veo, por ejemplo, que para pintar al óleo, a la acuarela, o a la tinta china, no es necesario SÓLO que el artista tenga talento y "sepa dibujar", ni mucho menos. Resulta sorprendente la cantidad de factores a tener en cuenta a la hora de empezar un proyecto artístico, y la cantidad de decisiones previas que han de tomarse. También resulta sorprendente cómo una técnica u otra puede "participar" de alguna manera en el proceso creativo. Pero lo que más me maravilla, sin duda alguna, es el conocimiento de la técnica que es NECESARIO tener para ejecutar una obra tal y como uno la había concebido. 

He podido comprobar, por los datos que nos ha ido dando la profesora, y los enlaces que hemos podido consultar en la web de la Universidad, que detrás de todas estas técnicas hay un gran trabajo de investigación, SÍ investigación! Hoy en día es fácil comprar pintura al óleo, o cola de conejo, o un pincel de unas determinadas características, pero hay que pensar que en el momento en que todas estas técnicas y utensilios fueron apareciendo (la época que, al fin y al cabo estudiaremos como alumnos de Historia del Arte), muchas veces, por no decir todas, los artistas tenían que ir fabricando sus propios utensilios: sus lienzos, sus pigmentos, sus pinceles... Y evidentemente, era necesario que alguien hubiera investigado y experimentado previamente al respecto. Solamente gracias a eso, hoy es posible que todo sea más cómodo.

Pero al echar la vista atrás, al ponernos en la piel de los artistas de los siglos pasados, podemos entender AHORA, la gran complejidad y dedicación con la que trabajaron en su arte. El gran conocimiento que debieron tener de las técnicas que utilizaban, el conocimiento de los productos químicos, el conocimiento del comportamiento de sus herramientas, etc...

Desde luego, ahora veo el arte de una manera mucho más global, y esto me hace admirarlo todavía más si cabe.

Por cierto... tengo que decir también que, gracias a esta asignatura, varios alumnos de mi clase hemos intercambiado opiniones muy interesantes, y varios de nosotros hemos empezado a pintar, dibujar, o a hacer algo artístico, sin ni siquiera habérnoslo planteado anteriormente.
Yo, personalmente, sin ir más lejos, hace ya un par de meses que me estoy dedicando a descubrir lo que puedo hacer con la acuarela. Y puedo decir... QUE ME ENCANTA!!! 


Tengo que decir también, de verdad, y en serio, que no me planteo la posibilidad de estudiar la carrera de Historia del Arte sin incluir una asignatura como esta. Evidentemente, el objetivo no es aprender a hacer nosotros lo que hicieron en su momento los artistas, sino saber qué y cómo tenían ellos que hacer lo que hacían para entender mucho mejor cómo funcionaba el proceso creativo, qué limitaciones tenían, cuán descabellados fueron en su momento, qué méritos tuvieron... Algo que, desde el punto de vista de la "tienda de bellas artes", es imposible poder percibir.

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